La HEMODIALISIS evita al paciente la responsabilidad de la realización del tratamiento y no requiere tener ningún tipo de material en el domicilio.
Parece presentar mejores resultados que la diálisis peritoneal a partir del tercer año de tratamiento (aunque no en todos los pacientes), y estaría más indicada en pacientes con cirugías abdominales extensas, o hernias que no se puedan operar (que no harían posible realizar diálisis peritoneal), y en quienes no se sienten capaces de realizarse el tratamiento a sí mismos.
Si no se consigue realizar una fístula arterio-venosa adecuada, se puede realizar utilizando un catéter venoso, pero lo más recomendable es que se realice a través de una fístula, que facilita mucho más el tratamiento y presenta menos problemas para el paciente. Si no se consigue una fístula funcionante es más aconsejable plantearse la realización de diálisis peritoneal que la hemodiálisis mediante catéter.
Editado en diciembre de 2012. Revisiones en Noviembre de 2014. Revisado en Marzo de 2021